Pierre Bourdieu y las prácticas sociales.

Las prácticas sociales

por Prof. Lic. Alberto Horacio Rodríguez

rodriguezgaley@gmail.com

Pierre Bourdieu (1930-2002) sociólogo francés contemporáneo, buscó en investigaciones empíricas la información y el estímulo para replantear el materialismo histórico. No intenta esta actualización en las áreas declaradas estratégicas por el marxismo clásico, sino en lo que la ortodoxia economicista había excluido o subvalorado: el arte, la educación, la cultura. Dentro de estos contextos, estudió, más que las relaciones de producción, los procesos sobre los que el marxismo menos ha explicado: los del consumo.
Las preguntas fundantes de casi todos sus trabajos, aunque nunca las enuncia expresamente, son dos:

1.¿Cómo están estructuradas, económica y simbólicamente, la reproducción y la diferenciación social?
2.¿Cómo se articulan lo económico y lo simbólico en los procesos de reproducción, diferenciación y construcción del poder?

Para responderlas, Bourdieu retoma dos ideas marxianas centrales:

- que la sociedad está estructurada en clases sociales y
- que las relaciones entre las clases son relaciones de lucha.

Sin embargo, su teoría social incorpora otras corrientes dedicadas a estudiar los sistemas simbólicos y las relaciones de poder. Por esto, y por su propio trabajo de investigación empírica y reelaboración teórica, su relación con el marxismo es controversial al menos en cuatro puntos:

A.Los vínculos entre producción, circulación y consumo: Aunque algunos textos teóricos marxianos, empezando por la Introducción general a la crítica de la economía política proponen una interacción dialéctica entre los tres términos, sus análisis del capitalismo se han centrado en la producción. En los últimos quince años algunos sociólogos marxistas, especialmente los dedicados a la cuestión urbana, tratan de teorizar el consumo e investigar sus estructuras, pero sus trabajos se ven limitados por seguir subordinándolo a la producción: lo ven únicamente como un lugar necesario para la reproducción de la fuerza de trabajo y la expansión del capital. Al no reconocer que el consumo es también un espacio decisivo para la constitución de las clases y la organización de sus diferencias, y que en el capitalismo contemporáneo adquiere una relativa autonomía, no logran ofrecer más que versiones aggiornadas del economicismo productivista tradicional del materialismo histórico. Bourdieu no desconoce la importancia de la producción, pero sus investigaciones se extienden preferentemente sobre el consumo. Las clases se diferencian para él, igual que en para Marx, por su relación con la producción, por la propiedad de ciertos bienes, pero también por el aspecto simbólico del consumo, o sea por la manera de usar los bienes transmutándolos en signos.

B.La teoría del valor trabajo: Gran parte de los análisis de Bourdieu sobre la constitución social del valor se ocupa de procesos que se restringen al mercado y al consumo. La escasez de los bienes, su apropiación diferencial por las distintas clases y las estrategias de distinción que elaboran al usarlos. Cuando desarrolla una concepción más estructural sobre la formación del valor a propósito del proceso de producción del arte, dice que no debe entendérselo como la suma del costo de producción, la materia prima y el tiempo de trabajo del artista: la fuente del valor no reside en lo que hace el creador, ni en cómo lo hace, ni en la decisión del marchante o la influencia de tal galería; es en el campo de producción, como sistema de relaciones objetivas entre estos agentes o estas instituciones. Este campo es el lugar de luchas por el monopolio del poder de consagración, donde se engendran continuamente el valor de las obras y la creencia en este valor.

C.La articulación entre lo económico y lo simbólico: Para Bourdieu las relaciones económicas entre las clases son fundamentales, pero siempre en relación con las otras formas de poder simbólicas, que contribuyen a la reproducción y la diferenciación social. La clase dominante puede imponerse en el plano económico, y reproducir esa dominación, si al mismo tiempo logra hegemonizarse en el campo cultural. En la reproducción define la formación social como un sistema de relaciones de fuerza y de sentido entre los grupos y las clases.

D.La determinación en última instancia y el concepto de clase social: Puesto que son indisociables lo económico y lo simbólico, la fuerza y el sentido, es imposible que uno de esos elementos se sustraiga de la unidad social y determine privilegiadamente, por sí solo, a la sociedad entera. Frente a esta concepción causalista: una causa “lo económico” determinaría el efecto “lo simbólico”; Bourdieu propone en varios textos una definición estructural de las clases y de sus relaciones. Es en La distinción donde mejor la formula y discute las implicaciones metodológicas. La clase social no puede ser definida por una sola variable o propiedad, ni siquiera la más determinante: el volumen y la estructura del capital; ni por una suma de propiedades (origen social + ingresos + nivel de instrucción). La clase social se define por la estructura de las relaciones entre todas las propiedades pertinentes que confiere a cada una de ellas y a los efectos que ella ejerce sobre las prácticas su valor propio. Es necesario romper con el pensamiento lineal, que no conoce más que las estructuras de orden simple de determinación directa y tratar de reconstruir en cada investigación las redes de relaciones encabalgadas, que están presentes en cada uno de los factores. Decir que esta causalidad estructural de una red de factores es irreductible a la eficacia simple de uno o varios de ellos no implica negar que los hechos sociales están determinados: si a través de cada uno de los factores se ejerce la eficacia de todos los otros, la multiplicidad de determinaciones conduce no a la indeterminación sino al contrario a la sobredeterminación.

¿Qué consecuencia tiene todo esto al estudiar las clases sociales?
Significa que para conocerlas no es suficiente establecer cómo participan en las relaciones de producción; también constituyen el modo de ser de una clase o una fracción de clase el barrio en que viven sus miembros, la escuela a la que envían a sus hijos, los lugares a los que van de vacaciones, lo que comen y la manera en que lo comen. Estas prácticas culturales son más que rasgos complementarios o consecuencias secundarias de su ubicación en el proceso productivo; componen un conjunto de características auxiliares que, a modo de exigencias tácitas, pueden funcionar como principios de selección o de exclusión reales sin ser jamás formalmente enunciadas.

Conceptos sociológicos en Pierre Bourdieu

Bourdieu considera que los hechos no hablan por sí mismos. Tienen sentido a partir de la lectura que aplique cada uno. Cada investigador abordará el marco de la investigación y de esa manera tomará algunas partes y desechará otras. El hecho científico se conquista, se construye, se comprueba y se aplica. Hay que saber el cómo a través de técnicas y procedimientos. Pero la Naturaleza no eterniza a lo que es producto de la Historia ni lo social se explica por y sólo por lo social. Objetivismo y subjetivismo son perspectivas parciales, son dos momentos del análisis sociológico.
Bourdieu define su enfoque como constructivismo estructuralista:

- Constructivista como una parte de los esquemas de percepción, de pensamiento y de acción que tienen que ver con el habitus y con el campo.
- Estructuralista al ser todo lo objetivo, independiente de la conciencia y de la voluntad de los agentes.

Para Bourdieu un campo es un conjunto de relaciones objetivas entre posiciones históricamente definidas incorporadas a los agentes sociales. Uno está en relación con el otro. El campo es un espacio de juego que existe en la medida en que haya jugadores que tengan las ganas y la capacidad de jugar el juego. En su redefinición marxiana considera la extensión de conceptos como los de capital e interés en otros campos sociales más allá de lo económico. Es decir, en el campo hay algo que está en juego, el capital, y hay un interés específico por él. El capital que está en juego responde a un momento histórico pero además ha sido acumulado en el curso de luchas anteriores. Hay un cierto número de intereses, un acuerdo entre los jugadores antagonistas acerca de lo que merece ser el objeto de la lucha. También hay cierto número de capitales. Los campos sociales se distinguen por el tipo de capital que se está jugando siendo entonces el grupo de bienes raros y dignos de ser buscados en una formación social determinada.

•El capital cultural existe objetivado en forma de libros, cuadros, instrumentos, etc. Y en estado incorporado, es decir, habilidades, conocimientos, valores (habitus).
•El capital social es el conjunto de recursos que están ligados a la posesión de una red duradera de relaciones.
•Existe un capital simbólico que tiene que ver con la fuerza física, el valor guerrero, etc.

Cada una de estas especies de capital cuenta con sub-especies. El lugar que se ocupa en el campo de juego es la posición en relación al capital en juego. Se puede poseer o no el capital pero es no sólo significativo en la definición de las posiciones sino que además está relacionado con el volumen mayor o menor de ese capital y el carácter legítimo o ilegítimo de la posesión de ese capital. Son relaciones de poder, de dominación, de dependencia. Todo entra en competencia en la lucha de cada campo.
El habitus es historia hecha cuerpo en el sentido de interiorización del exterior y a la vez capital a partir del cual el agente define su acción en las nuevas situaciones que se le presentan. Las prácticas y las representaciones generadas por el habitus son producto de un sentido práctico, una aptitud para actuar según el espacio social, según la lógica del campo y de la situación en la cual se está comprometido. El sentido del juego social (el sentido práctico) tiene una lógica ligada al tiempo de juego y a su ritmo. Entonces existe una relación habitus-estrategia queriendo decir con esto que las prácticas sociales obedecen a regularidades que se explican por la posición en el campo y por los habitus incorporados. Una clase social tiene un peso funcional en la estructura de clases y propiedades ligadas a las relaciones que mantiene con las otras clases.

Bibliografía

BOURDIEU, Pierre. La distinción. Criterio y bases sociales del gusto. Madrid: Taurus, 1998
BOURDIEU, Pierre. Intelectuales, política y poder. Buenos Aires. Eudeba, 1999
BOURDIEU, Pierre. El oficio del sociólogo. Madrid: Siglo XXI, 2000.
BOURDIEU, Pierre. Poder, derecho y clases sociales. Bilbao: Editorial Desclée de Brouwer, 2000.
BOURDIEU, Pierre. El sentido práctico. Madrid, Taurus, 2002.

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